Monday, October 20, 2008

Aqui en las montañas...


Ayer estuve en las montañas, me senté en el llano verdoso, cerré los ojos, respiré el aire puro y mientras me llenaba de paz abrí mis ojos, te ví y me preguntaste ¿Por qué sonríes? -Porque me encantas- respondí. Y tu preguntaste - ¿por qué te encanto? Te miré fijamente y contesté - Es que me haces sentir feliz porque haz puesto los ojos en mi, eres un hombre inteligente, capacitado, trabajador, culto, sumamente encantador, sensual, sexual, pasional, excelente amante. Aún más, porque gracias a ti entendí que soy una mujer capaz de encontrar al hombre que tanto he deseado y al que aun no he tenido la dicha de conocer, ese hombre igual a ti en lo antes descrito pero con la particularidad de que su corazón también tenga los ojos puestos en mi, con el que pueda pasar las 23 horas restante después del sexo. Al que pueda alimentar con mi ser al mismo tiempo en que me nutro de su experiencia, con el que me sienta tan chiquitica y grande que no existan espacios para la inseguridad.

Tomé aire una vez más, y ya no estabas, comprendí que debía de agradecer al Supremo por haberte puesto en mi camino... así lo hice.